sábado, 3 de enero de 2015

Locura

Dos riendas que luchan por controlarse la una a la otra,
por mantenerse fuertes, por no perder la cordura.

De verdad parecen ser tan diferentes,
cuando el corazón le pregunta a la mente
por qué ya no puede quererte.
Pero no entiende de argumentos,
¿qué hará con tanto amor,
con la idea de perderte?

Le pregunta si tendrá que cerrar los ojos
ante cada sonrisa tuya,
ante esos ojos tuyos;
para evitar no encontrar la mirada
que antes en ellos buscaba.
La que mi piel erizaba
la que mi boca callaba.
La que a mí sabía y que quizás ahora
por otros paisajes ya esté perdida,
y ya no me mire,
y ya no sea mía.

Hola (:

Hace unos días empecé a mover estas palabras a un nuevo lugar, y también a escribir nuevas por allá. Así que, si me quieres seguir leyendo, ...